Mala Praxis c01: La Melancolía de Maruja Salamina V
Esta historia es ficticia. No está inspirada en personajes, organizaciones ni hechos reales. Cualquier parecido con la realidad es pura casualidad... lo juro... tuturuturu...
Capítulo 1: La Melancolía de Maruja Salamina V
Toda la noche pensando, toda la noche en vela y no he podido resolverlos. Las dudas que inquietan a un médico son infinitas, ya que de la gran mayoría de enfermedades aún se desconoce su causa y son numerosos los interrogantes en el campo de la investigación.
Incluso hoy en día, que todo el mundo tiene a su disposición la red de redes, muchas cuestiones pueden ser solucionadas, pero no podía haber momento más inoportuno para un fallo de conexión. La desesperación afloraba en todo mi ser, toda la noche con un solo pensamiento en mente, toda la noche preguntándome cómo… cómo se llamaba el primer personaje protagonista de Doctor en Alaska.
Inquietado por semejante duda, me dirigí directamente al despacho saltándome la sesión clínica. Total, tampoco es que preste mucha atención normalmente. Llegué al ascensor principal. Roto. Alcancé rápidamente el elevador de la cocina. Roto.
Odio incontrolado.
El subidón de adrenalina hizo que subiera corriendo las 13 plantas por las escaleras. Sudando, gimiendo y con la cara roja, entré en el despacho y me fui derecho al ordenador. Roto.
Ira homicida.
Lo siguiente que recuerdo fue que estaba llorando como un niño sobre la mesa cuando, de repente, se abrió la puerta y… ¡Bah! Se trataba del Dr. Macías. A éste ni le pregunto, que tiene de friki lo que yo de obispo evangelista, si los evangelistas tuvieran obispos, cosa que no sé con certeza.
—¡Doctor, ya tengo los resultados de las pruebas de Maruja! —Dijo Rodrigo entusiasmado.
—Me da igual, no me importan, hoy no estoy de humor para nada. —Le contesté con la cabeza apoyada sobre la mesa.
—¡Pero Doctor, si usted me dijo que…! —Dijo Rodrigo mientras una voz familiar le interrumpía.
—Quita Rodri, que le voy a pegar una colleja a este elemento, que se le van a quitar las ganas de vaguear.
Levanté la cabeza y ante mi, la Dra. Alba Touriño, mi residente de tercer año. 27 años de belleza e inteligencia femenina metidos en un solo cuerpo. Rubia, ojos azules, ni muy alta ni muy baja, medidas perfectas, y Cum Laude en la Facultade de Medicina de Santiago de Compostela, y encima...
—Gabi, ¿qué te ocurre? —Me dijo mientras se acercaba.
—Albariña… —Le dije con ojos de cordero. —Dime, por favor, ¿cómo puñetas se llamaba el protagonista de Doctor en Alaska, el primero?
—Joel Fleishman. —Me contestó con una sonrisa en la cara.
… era friki.
—Cásate conmigo. —Le solté.
—Gabi, ¿cuántas veces te tengo que decir que yo no me lío con gente del trabajo, y menos con médicos?
—Pero si yo no te he pedido que te líes conmigo, te he pedido en matrimonio.
—Vamos, Gabi, que ya he perdido la cuenta. Estamos bien siendo amigos, además, eres mi jefe.
—Eso se puede arreglar…
—Ni si te ocurra echarme, sabes que no podrías vivir sin mi.
—Ehm… est… ah… Tienes razón, siempre la tienes, Albariña. —A ver quién le niega a esta Diosa que tiene razón, cuando además, la tiene. —Bueno Rodri, ya estoy con ánimos, ¿de qué me estabas hablando?
—De las pruebas de Maruja. —Me respondió Rodrigo un poco molesto.
—Antes que nada, hay que poner a Albariña al corriente de to…
—Ya lo ha hecho Rodri, tranquilo. —Me interrumpió Albariña. —Y tengo que añadir que las pruebas son totalmente normales, así que propongo que la realicemos una TC.
—Un momento, Albariña, que aquí el que manda y decide soy yo. —Dije con tono solemne. —Rodrigo, ponte a rellenar los papeles para que a Maruja le hagan una TC urgentemente, que Albariña y yo vamos a ver cómo está.
—Pero Doctor, si le estaba haciendo yo el seguimiento a la paciente…
—Sin lloriqueos, Rodrigo, que ya eres mayorcito. Además, Albariña ya es R-3* y está muy buena.
Albariña me pegó un codazo en la boca del estómago.
—Quería decir que es más experta que tú, y puede resultar de mayor ayuda.
—Haber sacado matrícula en Anatomía Humana y ser cinturón negro de jujutsu es una combinación peligrosa.
Salimos del despacho, dejando a Rodrigo con su tarea. Antes de entrar en la habitación, me acerqué a Albariña.
—Albariña, tú que sugieres ante este caso.
—Gabi, creo que te has dejado bastantes cosas en el tintero. Yo empezaría preguntándole un par de cosas sobre su entorno, los cambios que recientemente han acontecido en su vida…
¡Qué bien habla la muchacha!
—… y si me apuras, indagar un poco más en su pasado, sobre todo acerca de sus padres…
¿Qué sería de Sherlock Holmes sin Watson?
—Gracias Albariña, ahora entremos.
Al entrar me llevé una sorpresa al darme cuenta de que Maruja no estaba sola. A los dos lados de la cama había cuatro personas, yo diría que de su misma edad. Una morena tetona, un chaval con sonrisa de gili, una gafitas leyendo un libro y un chico con cara de capullo y el ceño fruncido.
Continuará...
*R-3: Forma coloquial de llamar a los MIR (Médico Interno Residente). Se utiliza la R seguido del año que están realizando de Residencia en el servicio.
Incluso hoy en día, que todo el mundo tiene a su disposición la red de redes, muchas cuestiones pueden ser solucionadas, pero no podía haber momento más inoportuno para un fallo de conexión. La desesperación afloraba en todo mi ser, toda la noche con un solo pensamiento en mente, toda la noche preguntándome cómo… cómo se llamaba el primer personaje protagonista de Doctor en Alaska.
Inquietado por semejante duda, me dirigí directamente al despacho saltándome la sesión clínica. Total, tampoco es que preste mucha atención normalmente. Llegué al ascensor principal. Roto. Alcancé rápidamente el elevador de la cocina. Roto.
Odio incontrolado.
El subidón de adrenalina hizo que subiera corriendo las 13 plantas por las escaleras. Sudando, gimiendo y con la cara roja, entré en el despacho y me fui derecho al ordenador. Roto.
Ira homicida.
Lo siguiente que recuerdo fue que estaba llorando como un niño sobre la mesa cuando, de repente, se abrió la puerta y… ¡Bah! Se trataba del Dr. Macías. A éste ni le pregunto, que tiene de friki lo que yo de obispo evangelista, si los evangelistas tuvieran obispos, cosa que no sé con certeza.
—¡Doctor, ya tengo los resultados de las pruebas de Maruja! —Dijo Rodrigo entusiasmado.
—Me da igual, no me importan, hoy no estoy de humor para nada. —Le contesté con la cabeza apoyada sobre la mesa.
—¡Pero Doctor, si usted me dijo que…! —Dijo Rodrigo mientras una voz familiar le interrumpía.
—Quita Rodri, que le voy a pegar una colleja a este elemento, que se le van a quitar las ganas de vaguear.
Levanté la cabeza y ante mi, la Dra. Alba Touriño, mi residente de tercer año. 27 años de belleza e inteligencia femenina metidos en un solo cuerpo. Rubia, ojos azules, ni muy alta ni muy baja, medidas perfectas, y Cum Laude en la Facultade de Medicina de Santiago de Compostela, y encima...
—Gabi, ¿qué te ocurre? —Me dijo mientras se acercaba.
—Albariña… —Le dije con ojos de cordero. —Dime, por favor, ¿cómo puñetas se llamaba el protagonista de Doctor en Alaska, el primero?
—Joel Fleishman. —Me contestó con una sonrisa en la cara.
… era friki.
—Cásate conmigo. —Le solté.
—Gabi, ¿cuántas veces te tengo que decir que yo no me lío con gente del trabajo, y menos con médicos?
—Pero si yo no te he pedido que te líes conmigo, te he pedido en matrimonio.
—Vamos, Gabi, que ya he perdido la cuenta. Estamos bien siendo amigos, además, eres mi jefe.
—Eso se puede arreglar…
—Ni si te ocurra echarme, sabes que no podrías vivir sin mi.
—Ehm… est… ah… Tienes razón, siempre la tienes, Albariña. —A ver quién le niega a esta Diosa que tiene razón, cuando además, la tiene. —Bueno Rodri, ya estoy con ánimos, ¿de qué me estabas hablando?
—De las pruebas de Maruja. —Me respondió Rodrigo un poco molesto.
—Antes que nada, hay que poner a Albariña al corriente de to…
—Ya lo ha hecho Rodri, tranquilo. —Me interrumpió Albariña. —Y tengo que añadir que las pruebas son totalmente normales, así que propongo que la realicemos una TC.
—Un momento, Albariña, que aquí el que manda y decide soy yo. —Dije con tono solemne. —Rodrigo, ponte a rellenar los papeles para que a Maruja le hagan una TC urgentemente, que Albariña y yo vamos a ver cómo está.
—Pero Doctor, si le estaba haciendo yo el seguimiento a la paciente…
—Sin lloriqueos, Rodrigo, que ya eres mayorcito. Además, Albariña ya es R-3* y está muy buena.
Albariña me pegó un codazo en la boca del estómago.
—Quería decir que es más experta que tú, y puede resultar de mayor ayuda.
—Haber sacado matrícula en Anatomía Humana y ser cinturón negro de jujutsu es una combinación peligrosa.
Salimos del despacho, dejando a Rodrigo con su tarea. Antes de entrar en la habitación, me acerqué a Albariña.
—Albariña, tú que sugieres ante este caso.
—Gabi, creo que te has dejado bastantes cosas en el tintero. Yo empezaría preguntándole un par de cosas sobre su entorno, los cambios que recientemente han acontecido en su vida…
¡Qué bien habla la muchacha!
—… y si me apuras, indagar un poco más en su pasado, sobre todo acerca de sus padres…
¿Qué sería de Sherlock Holmes sin Watson?
—Gracias Albariña, ahora entremos.
Al entrar me llevé una sorpresa al darme cuenta de que Maruja no estaba sola. A los dos lados de la cama había cuatro personas, yo diría que de su misma edad. Una morena tetona, un chaval con sonrisa de gili, una gafitas leyendo un libro y un chico con cara de capullo y el ceño fruncido.
Continuará...
*R-3: Forma coloquial de llamar a los MIR (Médico Interno Residente). Se utiliza la R seguido del año que están realizando de Residencia en el servicio.
El próximo viernes se desvelará el "gran secreto" que envuelve a Maruja Salamina... ¡No querrás perdértelo! Sólo en BLOGDECHUSE...
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5 bofetadas:
¡¡¡¡Coño~~~!!!!, la brigada SOS reunida xD.
¿Por qué no pruebas a hacer un dibujo de Alba Touriño? Estee... lo digo sólo para que los letores nos hagamos a la idea del personaje, nada más...
Claro, claro, y ya que es tan buena en anatomía la dibujas desnuda, así nos hacemos mejor idea, ¿no? xD
Buen capítulo, aunque prácticamente no pasó nada XD. Por cierto, ni me suena esa serie de Doctor en Alaska...
Jajaja "odio incontrolado... ira homicida". ¿lo de que todo estaba roto lo pusiste por que si o reflejabas que las instalaciones en la realidad estan hechas mierda?
Si antes no se daba cuenta, ahora más le vale XD. Este cap ha avanzado mucho más lento que los demás, ya que las cosas siguen prácticamente como antes. Bueno, pues esperando siguiente cap...
PD: Lo de Doctor en Alaska me suena de algo, aunque no sé de que -.-
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